Entré en la prepa, los pantalones rotos, las idas a Coruña por ropa de dudosa procedencia y de duración superprobada. Las botas de caminata para la nieve compradas de medio uso en tepito, que por cierto jamás las usé en la nieve porque en el DF nunca hay nieve si no es en el inalcanzable ajusco nevado de los noventas. Unos levis 501, el disco oscuro de Metallica, los cagantes GunsN´Roses, Extreme, Janes Addiction, Los Redhotchillipeppers, la televisión por cable, mi recámara en obra negra, las madrugadas con el olor a la gasolina Magna-sin, las combis en el metro CU... mis primeras pedas.
Los pixies, los aullidos de los pixies...